Normalmente, cuando planeamos nuestras vacaciones, solemos querer hacer un viaje para desconectar de toda la rutina y el estrés que tenemos por culpa de nuestro trabajo y nuestra vida diaria. Por tanto, para los que viajamos, es muy importante dar con el lugar adecuado para conseguir esa sensación de paz (o de aventura) que necesitamos desde hace un tiempo. Pero estos viajes suelen ser de más de una semana (o incluso de más de dos semanas) a lugares que no están cerca precisamente. Que si revisar el coche, el billete de avión, los niños, el trabajo, los vecinos.... son tantas cosas las que debemos preparar antes de irnos que no nos extraña que muchas veces nos dejemos algunas cosas en casa. Por este motivo, nosotros vamos a ayudarte con todo el tema de la preparación de un viaje largo y a darte una serie de consejos que, sin duda, te van a venir muy bien a la hora de planearlo. Así conseguimos que no salga nada mal o que, al menos, salga lo mejor posible.
En primer lugar, el consejo más importante de todos es que te adaptes al destino que vayas a visitar. Es decir, sabemos que parece una tontería porque es muy obvio, pero te sorprendería saber los casos más raros que se dan por ahí luego. Y es que no es lo mismo preparar un viaje a Nueva York que uno a Cabo Verde. Desde la ropa y el calzado hasta la documentación cambia según el sitio que visites, por lo que no exige la misma preparación. Así que antes que nada, tienes que tener claro donde vas, la temperatura que suele hacer, si llueve, si es una ciudad o es campo, si vas a un campamento o a un hotel, el idioma que se habla, si vas en avión o en coche... todas estas variables influyen a la hora de planear un viaje largo.
Una vez has definido el lugar al que quieres viajar, debes planear qué es lo que quieres hacer en tu destino, o mejor dicho, qué tipo de viaje vas a realizas. Es decir, no es lo mismo ir al Palace que irse a un campamento. Por tanto, una vez hayas decidido el destino, debes ver que es lo que quieres hacer en ese destino (turismo, descansar en la playa...). Por tanto, también es muy importante investigar cuáles son los lugares y monumentos más emblemáticos de nuestro destino para aprovechar al máximo nuestro viaje. Y por qué no decirlo, para poder viajar de forma ordenada y sin ir a lo loco buscando restaurantes donde comer o la línea de metro que queremos coger. Además, planearlo todo por encima te va a ayudar a definir un presupuesto aproximado de lo que te va a costar el viaje porque ya sabemos que por mucho que planeemos un viaje siempre terminamos haciendo cosas inesperadas que no habíamos planeado.
Después de planear un poco el viaje, debemos organizar nuestra documentación y asegurarnos de que la tenemos totalmente actualizada. No estamos hablando solo del DNI, también es conveniente (aunque viajemos a paises pertenecientes a la UE) que nuestro pasaporte esté en regla, confirmar la reserva de hotel y imprimir los billetes de avión. Si viajamos en familia, debemos preocuparnos por la documentación de toda la familia para no encontrarnos con alguna sorpresa insesperada. Y es que a cuánta gente conoces que ha tenido que ir corriendo a la comisaria para renovarse el DNI el día anterior a salir de viaje porque le ha pillado por sorpresa su caducidad. Así que ya sabes, que no te pille por sorpresa.
Una vez tengamos todo el tema burocrático resuelto, debemos hacer una lista de las cosas que nos queremos llevar para el viaje (para que así no se nos olvide nada). Es importante que elijamos el tipo de ropa y de calzado según el clima que haga en nuestra ciudad de destino. Es decir, si nos vamos 15 días a las islas griegas, será recomendable que nos llevemos un bañador para darnos algún baño. En cambio, si viajamos a Nueva York, será recomendable llevarse alguna prenda de abrigo porque las temperaturas son más bajas que aquí. A la hora de hacer la maleta, ahorraremos mucho lugar si ponemos las prendas grandes (sábanas, mantas o toallas) en los laterales de la maleta. En la parte del fondo de la maleta es recomendable que pongamos los pantalones enrollados cuidadosamente para ahorrar espacio. Encima de éstos coloca todas las camisetas, camisas y abrigos. El calzado guárdalo en un compartimento diferente, metiendo los calcetines dentro de los zapatos para ahorrar espacio. Y, por último, la ropa interior guárdala en otro compartimento para no mezclarla con la ropa normal. De esta forma, conseguirás ahorrar un montón de espacio en tu maleta. Recuerda que también es recomendable que te lleves medicamentos pertinentes si sufres algún tipo de enfermedad.
Ahora ya tienes listo todo lo que te hace falta para que tu viaje sea un éxito, pero... no olvides lo más importante: tu casa. Aunque tú te vayas de viaje un tiempo, la casa no se va contigo, ni el perro, ni las plantas... así que debes buscar a alguien que cuide de todas tus mascotas o cosas. Por tanto, procura dejarle las llaves de tu casa a algún familiar o amigo para que le eche un vistazo de vez en cuando y vea que todo está en orden (grifos, puerta, gas, luz...).
Ahora sí que ya estás totalmente preparado para asumir un viaje largo con la máxima seguridad y garantía de que va a ser un éxito total. Por lo que sólo te queda disfrutar de las merecidas vacaciones y descubrir todo lo que puedas en el destino que vas a visitar. No te preocupes de nada y sólo vive el momento.