Durante décadas, las dos compañías fabricantes de aviones han presentado modelos que ya son una referencia en el mercado. Ambos desarrollaron aeronaves famosas por su equipamiento y comodidad que son requeridas por clientes acaudalados y por instituciones importantes. Un ejemplo de ello es la unidad que traslada al presidente estadounidense, conocida como Air Force One, un avión con las más sofisticadas herramientas tecnológicas y los últimos avances en seguridad; el Boeing 747 tiene capacidad para 500 pasajeros y cuenta incluso con ascensores para ir de un piso a otro. Además de la Casa Blanca, se ha podido saber que otro de estos aviones es de propiedad del emir de Dubai, así como otras personalidades y líderes mundiales.
Imagen: moonm/Wikimedia
El modelo 747-8 (foto), de reciente lanzamiento ya tiene su primer pedido de parte de un multimillonario proveniente de la zona del Golfo Pérsico. Cada una de estas aeronaves cuesta más de 200 millones de euros, y el cliente elige el tipo de decoración interior, que puede tener ambientes con jacuzzi, salas de reuniones y otras tantas opciones.
Por su parte, la compañía Airbus ha vendido una de las unidades A380 a un cliente opulento no divulgado, si bien las versiones más requeridas por este tipo de compradores son las A320, para 150 pasajeros, que habitualmente son adquiridas por empresas como Royal Jet o Al Jaber asentadas en Abu Dhabi. Tanto Airbus como Boeing trabajan en sus próximos modelos; la empresa europea lanzará A320 neo para 2015, y la norteamericana ya tiene pedidos del nuevo 737 Max, el que hará entrega desde 2017.
